Chiles jalapeños rellenos de cordero y queso

Con las sobras de carne que reservé de preparar una glasa para el cordero a baja temperatura hice este delicioso y sencillísimo aperitivo.

Ingredientes. Sólo necesitas:

  • Jalapeños frescos.
  • Carne de cordero cocida.
  • Queso de raclette
  • Sal y pimienta.

Preparación:

  • Abre los jalapeños longitudinalmente.
  • Retira las semillas y las tiras blancas que sujetan las semillas a la fruta (es lo más picante del chile).
  • Blanquéa tres veces en tres aguas de forma que pierda parte de su picante
  • Y termina de cocer en el último blanqueo hasta que queden tiernos.
  • Calienta el grill del horno al máximo.
  • Mientras tanto, rellena los chiles con la carne y el queso
  • Y sólo queda gratinar en la parte más alta del horno hasta que queden bien dorados.

Huevo, trufa, salsa de soja

No hay nada más fácil, una cama de espinacas, calabacín y espárragos, un par de huevos cocidos a 63º C, unas laminitas de trufa (aprovechando que estamos en temporada) y todo aderezado con cristales de sal y un poco de salsa de soja. A propósito, qué bien combina la salsa de soja con la trufa. Delicioso.

Piel de pollo confitada y frita en grasa de pato

Una auténtica delicia -y mejor aún que las de cerdo. Además, el sabor que le da la grasa de pato es inmejorable.

La piel va primero confitada en grasa de pato a baja temperatura (unos 85º C entre 40 minutos y una hora) para fundir el exceso de grasa de la piel.

Luego subimos la temperatura hasta 175º C y terminamos de deshidratar la piel mientras la freímos.

¿Se puede empezar mejor una cena que con un par de cortezas de pollo y una buena cerveza? no lo tengo nada claro.

¡Convocatoria para nuestra nueva cena secreta Umami Madrid!

¡Hola aficionados a la aventura gastronómica!

Últimamente hemos estado ocupados con otros proyectos pero también hemos trabajado sobre nuevas recetas y  experimentos culinarios que estamos deseando compartir con vosotros…

Ya ha pasado un tiempo desde las grandes comidas de fin del año así que por fin os proponemos una fecha para nuestra próxima cena clandestina.

Como otras veces, utilizaremos ingredientes exóticos que no se pueden encontrar en Madrid y prepararemos platillos sorprendentes y con el picante justo para dar calor a la noche…;).

Además en esta cena queremos incluir preparaciones de las que estamos muy orgulloso y que vamos a servir en primicia, como el cocktail de Gin-Tonic «achampanado» con tónica hecha en casa, algunos ahumados caseros que nos han dado resultados increíbles y otras preparaciones con ostras con las que queremos sorprenderos.

Además de un menú degustación parecido a los anteriores, la cena incluirá cervezas y varios vinos que irán cambiando con lo que tomemos.

Y ahora vamos con los detalles de siempre:

  • ¿Cuándo?: jueves 6 de febrero, a las 9 p.m.
  • ¿Dónde? en Madrid centro –os enviaremos una dirección con la confirmación.
  • ¿Cuánto? se aceptará gustosamente una donación de 75 €.
  • ¿Cuántos seremos en total? 6 personas.
  • ¿Cómo apuntarme? Envía un correo a umamimadrid (@) gmail (.) com con tu nombre, número de teléfono móvil y número de asistentes como tarde el viernes 31 de enero.
  • ¿Limitaciones? si tenéis algún tipo de requerimiento especial (alergias, ingredientes que no podéis tomar…) incluidlo en el mail.
  • ¿Quién soy? Si queréis, también podéis incluir un pequeño texto sobre vosotros o el motivo por el que os apetece venir a cenar.
  • ¿Qué debo tener en cuenta? Los platos pueden ser picantes, puede haber preparaciones en crudo y como se tratará de un menú cerrado para una mesa entera, no se podrán hacer grandes cambios.
  • ¿Cuándo sabré si puedo ir? antes del lunes 3 de febrero enviaremos un e-mail de confirmación a todos para deciros si habéis tenido suerte en el sorteo.

Si queréis saber más sobre el resto de las cenas podéis hacerlo pinchando aquí.

¡Hasta pronto!

Pollo en salsa huacatay y aguacate extraordinario

Nuestro amigo Saúl Cereto, acaba de regalarnos unos aguacates. No porque tuviera demasiados en su casa o porque estuvieran en oferta en el mercado… 😉 No. Son los que cultiva su padre, y, casi me faltan palabras para describirlos. Son increíbles, con un ligerito sabor a nueces, un toque dulce y muy cremoso. Así que, por supuesto nos hemos comido la mayor parte tal cual.

Luego, para cambiar un poco, hice una salsita con un aguacate y las hojas de huacatay que teníamos ya en la nevera. Para la receta me inspiré del libro de Cocina peruana de Teresa Ocampo. Pensé en esta receta porque los aguacates que tenemos tienen una textura tan maravillosa quería probarlos en salsa junto con el queso fresco que se suele usar…

El resultado me gustó muchísimo…y ya tengo ganas de experimentar más recetitas “verdes”…

Ingredientes para 4 pax:

  • 4 contra muslos  de pollo.
  • 1 cebolla chica, picada.
  • 2 dientes de ajo
  • Aceite de girasol
  • 1 manojo de huacatay.
  • ½ aguacate maduro, cortado en dados
  • Caldo de pollo
  • Sal y pimienta al gusto
  • Un chorrito de salsa de soja y salsa picante, tipo tabasco (opcionales)

Preparación:

Dora los contramuslos de pollo con un poco de aceite de girasol. Una vez casi cocidos reserva en un plato.

Calienta un par de cucharas de aceite de girasol y cuando esté caliente echa el ajo. Cuando esté bien doradito, echa la cebolla y cuece hasta que quede transparente. Añade los trozos de aguacate, las hojas de huacatay, sal, pimienta y la sala de soja. Tritura todo con una batidora y añade un poco de caldo de pollo hasta que consigas la textura deseada.

Antes de servir, calentar los trozos de pollo con la salsa durante unos minutos.

Piel de pollo crujiente para terminar de aderezar platillos

Tenía en la nevera unas pieles de pollo reservadas de haber preparado un caldo y con lo que me gustan no quería tirarlas, así que dando vueltas se me ocurrió cortarlas en tiritas y darles un vaivén en una sartén antiadherente con un poco de la grasa de pollo (puedes sustituir por aceite si no tienes). Quedaron sensacionales: doraditas, crujientes y muy, muy sabrosas.

Las he utilizado para servir sobre cremas de verduras, para darle un punto diferente y crujiente a ensaladas e incluso para acompañar una pechuga de pollo cocinado a baja temperatura (56ºC). ¿Qué otros usos se os ocurren?