Carne picada y seca con sabores del S.E. asiático

carne picada y seca asia

Si te gusta acabará siendo parte de tu fondo de nevera, siempre disponible para aliñar y terminar de dar sabor a tus tapas y platillos. Combina de maravilla con cilantro y lima, úsalo con huevo, arroz, pasta, sopa de ajo… las posibilidades son infinitas. Por orden: saldado, picante y algo dulce – por no hablar de su delicioso aroma.

Lo interesante es que, como tiene muy poca agua y resulta bastante salado, dura una eternidad, incluso fuera de la nevera. Y además aporta un intenso sabor a cualquier plato. Cuando lo uses, no pienses en  carne picada, utilízalo para terrminar de aderezar, como si fuera sal, pimienta o guindilla.

Ingredientes (las cantidades son sólo orientativas, deja que tus preferencias te guíen):

  • 1 kg de carne ternera picada
  • 6 dientes de ajo muy picados
  • Un montón de jengibre, también bien picado (si te gusta)
  • Una buena cantidad de hojas de lima kaffir pien picaditas y sin el «nervio» central
  • 1 cucharada de sal
  • 5 guindillas «bird’s eye»
  • 2 cucharadas de pasta de gambas fermentada (a la venta en supermercados asiáticos)
  • 5 cucharadas de salsa de pescado tailandesa (a la venta en supermercados asiáticos)
  • 3 cucharadas de azúcar

Preparación:
Saltea el ajo y el jengibre en aceite hasta que quede bien dorado. Añade la pasta de gamas fermentada y dora para realzar su sabor.
Incorpora la carne picada junto con el resto de ingredientes y saltea hasta que se dore bien y reduzca a 1/4 su volumen.

Tiene que saber dulce, ser más salada de lo normal y bastante picante. Cuando casi esté hecha prueba y rectifica si fuera necesario.

Ensalada de oveja cruda al estilo filipino

Hoy me ha traído una amiga filipina esta maravilla, increíblemente sorprendente y deliciosa.

Se trata de un tartar de oveja – cada 2 semanas un grupo de amigos filipinos compran una oveja lechal recién matada, retiran el pelo de la piel quemándola con un soplete o sobre un fuego, reparten la carne y reparan muchísimos platos, entre otros, esta delicia bizarra usando la carne y la piel medio quemada. Me comenta que está aún mejor cuando la piel está  más churruscada – habrá que esperar a la próxima vez.

tartar oveja lechal detalle piel

El resultado es simplemente delicioso: en boca la piel ejerce un poco de resistencia, aporta una textura increíble, la carne da un sabor suave pero inconfundible a cordero y el resto de ingredientes le dan un aroma delicioso y una frescura propia de este tiempo. Perfecto para tomar en verano.

Ingredientes:

  • Carne y piel de oveja lechal recién matada a la que se le ha retirado el pelo quemándola sobre unas brasas o con un soplete.
  • Cebolla.
  • Jengibre.
  • Chiles.
  • Jugo de lima.
  • Vinagre.
  • Pimienta.
  • Sal.

Preparación:

Adereza la carne con los ingredientes. Se puede tomar inmediatamente o dejarlo curar durante un día o dos en la nevera.

tartar filipino oveja

 ¡¡Y a disfrutar!! (Si es que te atreves y consigues hacerte con carne de oveja con su piel).

Caldo de oreja de cerdo, tan bueno como para bañarse en él

ramen oreja cerdo

Mi último gran descubrimiento, tan delicioso que podría sumergirme en el caldo hasta que se me arrugasen las yemas de los dedos.

Me vuelve loco cómo se pegan los labios de la cantidad de gelatina que contiene. Ademá,s tiene un color ligeramente lechoso que sólo había visto en caldos de cerdo en Japón que me encanta. Estoy seguro de que se va a convertir en un ingrediente fetiche a partir de ahora, no será la última vez que lo veáis en el blog.

Ingredientes para 1.5 litros de caldo:

  • Dos orejas de cerdo.
  • Una cebolla.
  • 4 clavos de olor.
  • 4 dientes de ajo.
  • Una cucharadita de pimienta en grano.
  • Una cucharadita de semillas de cilantro.
  • Sal.
  • Una cucharadita de glutamato monosódico.
  • 2 cucharadas de azúcar.
  • Una cucharada de salsa de pescado.
  • 2 segmentos de una pieza de anís estrellado (no uses más que es una especia muy intensa y no buscamos darle tanta potencia como a un Pho).

Preparación: cuece en olla express durante 30 minutos. Abre bajo chorro de agua, cuela y reduce a la mitad.

Con este sabor tan cerdil no podía quitarme de la cabeza los ramen tan deliciosos que tomé en mi último viaje a Japón, así que me puse manos a la obra con lo que tenía en casa para hacer algo que resultó totalmente heterodoxo: en vez de ramen, unos espaguetis italianos (De Cecco) unos dados de rape salteados para dar un punto de mar a tanto monte, ajo bien doradito, pimienta y menta. Definitivo. 

Y las orejas las reservamos para otra preparación.

Chiles jalapeños rellenos de cordero y queso

Con las sobras de carne que reservé de preparar una glasa para el cordero a baja temperatura hice este delicioso y sencillísimo aperitivo.

Ingredientes. Sólo necesitas:

  • Jalapeños frescos.
  • Carne de cordero cocida.
  • Queso de raclette
  • Sal y pimienta.

Preparación:

  • Abre los jalapeños longitudinalmente.
  • Retira las semillas y las tiras blancas que sujetan las semillas a la fruta (es lo más picante del chile).
  • Blanquéa tres veces en tres aguas de forma que pierda parte de su picante
  • Y termina de cocer en el último blanqueo hasta que queden tiernos.
  • Calienta el grill del horno al máximo.
  • Mientras tanto, rellena los chiles con la carne y el queso
  • Y sólo queda gratinar en la parte más alta del horno hasta que queden bien dorados.

Pierna de cordero lechal a baja temperatura con comino

Os aseguro que pocas cosas pueden ser tan resultonas y a la vez tan fáciles como este plato. Y si lo hacéis en estas fiestas vais a quedar como auténticos reyes.

Ya lo saben los árabes, la combinación cordero- comino es una de las mejores que existe, no sé qué tiene, pero es increíble cómo potencia y mejora su sabor.

No había preparado cordero al vacío antes y el resultado nos ha gustado mucho, especialmente después de estar acostumbrado al cordero recocido con el que nos han castigado tanto tiempo a todos los españoles. Para prepararlo, cuece la pierna sólo con un poco de sal a 55 56ºC hasta que llegue a corazón de producto a 54 55ºC – aproximadamente una hora y media para una pieza de unos 800 gr.

Para la salsa:

  • Un poquito de comino
  • Pimienta
  • Sal
  • 1/2 cebolla
  • Un diente de ajo
  • Una zanahoria de tamaño normal
  • Una cucharadita de concentrado de tomate (de venta en tiendas italianas)
  • Unos huesos de cordero
  • Una hoja de laurel pequeña
  • 1/2 litro de agua

Preparación en una olla a presión:

  • Tuesta en seco el comino y la pimienta y reserva.
  • Añade un poco de aceite y pocha la cebolla, el ajo y la zanahoria hasta que se dore y saltea un poco el concentrado de tomate.
  • Retira la verdura y dora los huesos de cordero hasta que cojan un bonito color dorado.
  • Añade la mitad del comino y todos los demás ingredientes menos la sal).
  • Tapa la olla y deja cocer durante una hora y media.
  • Abre la olla, cuela el jugo, desgrásalo y reduce hasta obtener 50 ml.
  • Rectifica de sal.

Final y presentación: 

Una vez que la pierna esté hecha, retira de la bolsa y deja secar al menos media hora de forma que también pierda un poco de temperatura.

Dora en una sartén a fuego bien fuerte hasta  que coja un bonito color y así sellar los jugos 😉.

Corta en láminas y sirve acompañada de la salsa. Añade el resto del comino por encima.

Terrina de manitas de cerdo

Receta barata, facilísima y deliciosa, una manera distinta de tomarse unas manitas:

  • Compra unas cinco manitas de cerdo bien hermosas, (nunca pies, que no tienen casi nada más que huesos).
  • Blanquea unos 5 minutos en agua hirviendo y tira el agua.
  • Cuece en olla rápida unos 20 minutos con los aromáticos que más te apetezca (yo usé salsa de pescado, sal, azúcar, canela, anís estrellado, pimienta, cebolla, laurel y ajo).
  • Deja enfriar en el caldo.
  • Retira las manitas y reduce el caldo a 1/4 de su volumen.
  • Mientras tanto deshuesa y rompe en piezas pequeñitas.
  • Pon las piezas en un molde y añade un poco del caldo reducido hasta cubrir.
  • Deja cuajar en la nevera, al menos un par de horas o tres.
  • Corta como más te guste y adereza con unas gotas de lima y su ralladura, aceite de sésamo picante y unos cristales de sal Maldon.